Hasta ahora cuando tu empresa quería instalar teléfonos sabia que se enfrentaba a un presupuesto importante. Tenías que comprar una centralita, teléfonos, pasar cables, etc. Además tenías que asumir los gastos de las averías, mantenimientos, modificaciones en la programación de las funcionalidades, etc.
Pero la telefonía IP es una revolución frente al concepto de la telefonía tradicional. Con la tecnología IP todo esto se acabo, ya no tienes que comprar ningún aparato, ni centralita, ni teléfonos, ni pagar mantenimientos, ni nada de eso. Tampoco tienes que pasar cables, sólo darte de alta, instalar los teléfonos que te proporciona la compañía y el servicio ya esta en marcha.
Además disfrutas de una tarifa plana real, en llamadas a fijos, móviles y llamadas internacionales a 30 países, ADSL, numero 902, unificación de sedes en un sola, un servicio de atención al cliente personalizado y sin permanencia de ningún tipo.